Este concepto lo explicó la que fue la profe de un curso de Energía Femenina @auragemmavila en épocas de Semana Santa en Málaga, y me pareció una reflexión tremendamente honesta.
🔴Jesucristo nos representa.
🔴Todos llevamos una cruz.
Una amiga mía acaba de ser operada de endometriosis, o sea, una histerectomía. Está en proceso de curación de la heridas físicas, pero como bien dice, nunca podrá recuperarse de las emocionales porque nunca podrá ser madre, cuando su sueño desde niña era serlo.
Ella me decía:
🟢- “¿Por qué a mi Miriam? ¿Por qué me ha tocado a mí? Lo que yo más deseaba en la vida. Yo no jugaba con Barbies, jugaba con muñecos que eran bebés y yo su madre.”
Yo le decía:
🟢- “A ti te ha tocado esta cruz”.
Su propia naturaleza femenina ha matado la primera casa del bebé, el útero.
Todos tenemos algo con lo que cargamos. Algo que nos marca, nos hunde y nos vuelve locxs cuando estamos débiles y se manifiesta. También está la cruz permanente, con la que simplemente tenemos que andar con ella.
Otra amiga mía, lleva años y años teniendo pluriempleo para pagar la gran deuda que tiene su padre desde que ella tiene 18 años.
Otra es el fallecimiento temprano de una madre o un padre. Un abuso en la infancia. Un patrón de parejas que maltratan. Un cáncer o un bloqueo en el ámbito laboral.
Mi amiga de la histerectomía, lleva años con esa cruz de forma permanente, ahora por fin el dolor físico se irá pero el estrés emocional y mental seguirá vivo, sin embargo, todo depende de la actitud que decida tomar ante ello:
🟡 Continuará siendo una pesadilla.
🟡 Pesará menos.
🟡 Se aceptará.
Así que nadie está en esta vida de rositas, siempre hay algo que cargó en el pasado y tiene secuelas, carga en el presente o cargará en el futuro.
La intensidad de la molestia de las cruces van por horas, por días, por semanas, por meses, por años, por épocas.
Lo importante, sacar fuerzas y foco de donde sea para evitar acabar crucificado.
Pero a veces, se nos lleva por delante, y morimos en la cruz.