Anna
Anna es una chica alta, esbelta, de pelo castaño mitad rapado y con algunas rastas llenas de historia cada una de ellas, piel morena y con aspecto de mostrarse 24 horas a la intemperie. Permanente sonrisa y unos ojos que te trasladan a otra dimensión, no se cual, pero de esta no es.
La mochila y su espacio a llenar es todo lo que tiene materialmente. Viste con ropa cómoda, ancha que le facilite estar en el suelo, ¡qué le gusta el suelo a Anna! No usa sujetador ni sigue las modas, ni las presiones estéticas de las mujeres.
Anna vive en el mundo.
«Tierras. Rincones. Naturaleza»
No existen las fronteras, ni los muros, ni los prejuicios para ella. Vive cada segundo como le llega y agradece todos y cada uno de ellos. Se guía de las señales que la vida le envía para tomar decisiones y moverse. Observa a su alrededor con una mirada abierta y receptora de sensaciones. Ella no piensa, no huele, no escucha, no mira, ella siente.
Es pura magia, gracias a su hipersensibilidad con el entorno y la conexión que tiene con ella misma orienta su rumbo. Recibe la información, la interpreta y sigue su camino en libertad.
Anna siente, luego ve y escucha.
Anna siente y con los otros 4 sentidos descifra.
Vive en cuevas, en la playa, bajo un puente, en albergues, en casas de conocidos y menos conocidos, en casa de amistades, de sus padres y de su humilde y amarillo hostal junto a la estación de Salou. Necesita muy poco para vivir, y con lo que gana en verano, vive el resto del año. Otra forma de vivir en que cada día es una aventura y una supervivencia escogida.
4 noches durmiendo en mi sofá-cama, transformado en solo sofá + saco de dormir por elección propia. Hoy está en Almería, desconozco dónde y con quién está, qué está haciendo y qué le pasará. Y estoy tranquila y en paz porque Anna tiene luz y el universo la protege.
Una niña que nació con estrella y envuelta en un aura que un día captó, comprendió y practicó. Pura sabiduría llegada desde arriba gracias a su apertura a la vida.
Diré que no la admiro, ni la considero una valiente. Ese estilo de vida es ella, escogido desde el amor y la conciencia. Ella es así y así lo siente. Se escuchó a sí misma, y su cabeza, sus pies y sus manos siguieron el compás de su corazón.
P.D. Anna tiene el don de leer lo ilegible.
Per tu Anna.
Gràcies per estar dins meu sempre.